¿Tienes bichitos que no querrías tener en tu huerto? ¿Te estás volviendo loco con los pulgones? ¿Crees que los caracoles se están comiendo tus plantas? Descubre cómo plantarles cara con soluciones caseras completamente ecológicas.
Con la llegada de las buenas temperaturas, no solo tus cultivos estarán rebosantes de vida. Un gran número de seres vivos pueden, potencialmente, visitar tu huerto con consecuencias no demasiado positivas. Es el caso de la mosca blanca, los pulgones, los ácaros, las arañas, las hormigas, los caracoles…
Está claro que si para cultivar en casa estamos usando métodos ecológicos y sostenibles, para evitar posibles plagas tampoco vamos a utilizar productos químicos. Es por eso que en este post te vamos a mostrar dos sencillos remedios caseros contra visitantes indeseados de tu huerto en casa. Para prepararlos solo vas a necesitar ingredientes normales que hay en cualquier casa.
Por cierto, te recomendamos este otro post para identificar qué insectos son los que atacan tus plantas.
Remedio contra pulgones, mosca blanca, ácaros y hongos
El principal ingrediente de este remedio casero es el laurel. Se trata de una sustancia que, por un lado, desagrada a ácaros, pulgonees, hongos y mosca blanca, entre otros “visitantes” y, por el otro, atrae a otro tipo de “fauna” beneficiosa para tus cultivos como las mariquitas.
Para preparar este “caldo” (así es como llaman los agricultores a estos remedios), sigue estos pasos:
– Hazte con varias hojas de laurel (puede ser seco o natural).
– Ponlas en agua hirviendo durante 5 minutos.
– Retira del fuego y añade a la cocción unas pocas gotas de jabón líquido.
– Déjalo todo macerar durante 24 horas.
– Cuela el resultado e introdúcelo en un pulverizador.
– Aplica en el haz y envés de las hojas afectadas.
– Haz una aplicación por la mañana y otra por la noche durante unos cuatro días.
Remedio contra caracoles y babosas
El principal ingrediente de este remedio es la cáscara de huevo.
Si el principal problema de sus cultivos son estos moluscos terrestres, sufrirás por cómo devoran hojas, yemas o brotes de tus plantas, principalmente por la noche y cuando el tiempo es especialmente húmedo o lluvioso. Ya que este tipo de animales se desplazan arrastrándose, gracias a la baba que segregan, la solución consiste en impedir que puedan moverse.
Para ello, basta con que cojas cáscaras de huevos (la cantidad dependerá de cuánto espacio quieras proteger), las trituras y las esparces sobre el sustrato. De esta manera las babosas o caracoles no podrán acceder porque se pincharán con ellas. ¡Así de sencillo!
Recuerda que con las cáscaras de huevo también puedes hacer un abono casero rico en calcio.
Hay decenas de maneras de solucionar las afecciones de tus plantas sin necesidad de recurrir a ingredientes poco sostenibles; en el capítulo 10 de nuestro libro te damos «recetas» con 17 ingredientes naturales diferentes para que hagas tu particular lucha biológica de manera ecológica. ¡Olvídate de insecticidas u otros productos poco sostenibles!
¡Sé lo más ecológico posible! 🙂
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